Los objetivos terapéuticos y preventivos se tratan de alcanzar mediante la realización de ejercicios terapéuticos en piscina climatizada con un acompañamiento cercano por el Fisioterapeuta.

Las personas de cualquier edad que presenten cuadros agudos y/o crónicos derivados de enfermedades reumatológicas (artritis, fibromialgia), ortopédicas y/o traumatológicas (escoliosis, cervicalgias, lumbalgias, esguinces, fracturas, situaciones post-cirugías: ligamentoplastias, prótesis), neurológicas (Parkinson, accidente vascular cerebral, retraso en el desarrollo motor) entre otras, se beneficiarán de este tipo de tratamiento. Las ventajas del tratamiento en piscina provienen de la asociación de los principios físicos del agua a una temperatura adecuada (flotación, presión hidrostática y viscosidad) con las técnicas de tratamiento específicas para este medio (Halliwick, Watsu, Bad Ragaz y hidrocinesiterapia).

Estos parámetros ajustados a la condición de cada paciente pueden promover resultados terapéuticos importantes, como: relajación, alivio del dolor, mejoría de la movilidad, del equilibrio y de la capacidad respiratoria, entre otros. La reducción del peso corporal en el agua facilita el entrenamiento de la marcha y de actividades del día a día que algunas veces no son posibles fuera de la piscina. Se ofertan tratamientos individuales y en grupo dirigidos por un equipo de fisioterapeutas todos con amplia experiencia en el campo de la hidroterapia y especializados en Fisioterapia en el medio acuático.